Creo que he dejado de escribir en el blog, porque me pasaría las letras pidiéndote perdon.

Esta es tu/nuestra segunda carta de amor, aunque debería ser de perdón.

Perdón por hacer las cosas tan mal.
Perdón por quererte tanto y hacerte tanto daño.
Perdón por ser tan desastre.
Perdón por no estar siempre a tu lado.
Perdón por ese pasado y ese futuro, que seguro será maravilloso, pero a veces no.

Perdón vida mía, porque hay días que te doy y otros te quito. Perdón por tanto….

Aunque no te lo creas, todas las veces que hago mal las cosas, mi intención siempre, siempre, siempre es hacerlo bien y sobre todo esforzarme con toda mi alma, pero no siempre lo consigo. Lo sé, pero ¡¡procuro aprender cada día!!

Me enseñas tanto… Y yo a veces tengo la sensacion de que te doy tan poco….
A veces, tengo días cariño mío, que no puedo más y doy lo que puedo. Hay días que no soy yo al 100% y aunque lo intento, no puedo dar mas. Perdóname por los días que solo hago lo que puedo.

Creo que no podría parar de decir perdón, porque la lío tantas veces…. Y tantas veces quiero hacerlo bien…

Pero ¿Sabes? Con todas esas veces de sí y no, de ahora no y luego sí, estamos aprendiendo las dos; las dos nos estamos forjando como personas y como madre e hija. Y ¿Sabes? Saldran mal las cosas, pero estan llenas de amor; amor puro, del que duele; del que lloras; del que ríes; del que deseas sentir toda la vida.

Por todo lo que siento y no puedo expresar, te escribo esta tu/nuestra segunda carta de amor, porque lo que siento por ti es amor, amor verdadero.

Maite zaitut, txikitina.