Me da mucha pena leer este títular, pero así es. Y no ha comenzado ella la operación destete, sino que he sido yo. Ya llevaba parte del mes de agosto con la idea en la cabeza y finalmente, ayer, de repente, decidí no darle teta para ir a dormir. Siempre me preguntaba cómo sería nuestro destete, igual que hacía con el momento de ponerme de parto y la conclusión es clara: mejor no pensar.

Ahora en serio. No es que quisiera destetarla, o sí, el caso es que empecé a darle solo teta una vez, una toma digamos, pero a su antojo. Podía tomar cuanto quisera de ambas tetas y el rato que quisiera antes de dormir.
Antes de esto, en julio más o menos creo, (sólo horrible para los tiempos) tomaba para ir a dormir y todas las veces que quisiera, es decir, las cientos de veces que se despertaba a la noche, le ponía a la teta. (Menos mal que aprendí a darle dormida de los dos pechos). Y de eso sí que estaba cansada. Así que decidí «solo una toma». Fue durísimo. Ella lloraba y yo le quería dar, que eso es lo peor, pero aguanté. Y al final es como el deporte, que una vez que te pones ya no lo dejas. Eres constante.

Y sobre dejar la teta del todo, pues la verdad que era algo que me rondaba en la cabeza; aunque ya se quedaba sola a las noches con mi marido si yo salía por ahí, quieras o no, la tenía en la mente; podrá dormir, estará pidiendo teta… por otro lado, me miraba el pecho en el espejo y os voy a ser sincera: más que tetas parecen cualquier cosa y la verdad es que ya me apetecía verlas como algo sexy o medio-sexy. No sé por qué pienso que al dejar el pecho, volverán a ser lo que eran. Sí lo sé, de esperanza también se vive. 😉
También me preguntaba a mi misma si no le dejaba el pecho por miedo a que ya «no me quisiera igual». Quieras que no, el momento de darle el pecho, nosotras solas en la habitación, riéndonos, mirándonos, es único y me daba mucha pena perderlo y que ya no nos quedará nada. Y esos pensamientos me hacían ver, a veces, que yo ya quería dejar, pero no me atrevía. Y lo de que otra persona le pudiera dormir, mientras yo estuviera en la misma casa también me apetecía.
(Creo que es fundamental, que en una relación de teta, madre e hij@ estén hasta que los dos quieran, que sea un deseo mutuo.)

Pensaba, cierto es, que los niñ@s dejaban de amantar solos, porque tenía algún que otro ejemplo cercano alrededor. Pero como bien me asesoraron en Amagintza, el destete natural puede que no se de hasta los 7 años. Y eso queráis o no, me tranquilizo. Sí porque en teoría ella no se iba a destetar y tendría que ser yo, si ese era mi deseo, quien debía empezar con el destete. Es decir, yo pensaba que sería ella la que lo dejaría (¿eso sería lo ideal no os parece? o mejor dicho, lo más «fácil» para la madre) pero teniendo en cuenta que había más posibiidades de que no lo hicera ella en un periodo corto de tiempo, me tranquilizo saber que yo lo «tenía» que hacer.

De momento llevamos dos días. El primero terrorífico; llorar, llorar y llorar. Pero le conté un cuento: las tetas de mamás estás muy cansaditas, porque te han dado mucha, mucha leche y ahora quieren ir a descansar. Necesitan dormir. Pero me han dicho que te diga que te quieren mucho, mucho, mucho. Y que se lo han pasado chupi contigo. Pero ahora cariño, están tan cansadas, que quieren ir a lolo.

Sí, ahora que lo escribo parece tontísimo, pero con ella en brazos, junticas, mirando el pecho y susurrándoselo, es bonito, de verdad. Y ella lo entiende, porque cuando ella está cansada también quiere ir a dormir para estár con energía al día siguiente.

Cierto es que es un «truco» que ya había usado alguna vez cuando después de 8 tomas, seguía queriendo teta o me dolían. Así que supongo que habrá ayudado, es decir, que no le resulta extraño, que las tetas de la ama quieran ir a dormir. Veremos a ver cómo resulta.

¿Cómo fue vuestro destete? ¿Lo iniciastéis vosotras o fue algo que hizo vuestro hij@?

Se inicia una nueva historia, otra llega a su final. 19 meses y 7 días pegadas la una a la otra, con la teta de la ama.  Maite&Amatxo <3 <3