En pocos días han sucedido muchas cosas. Os hago un breve resumen, que hoy es mi cumple (¡veintitodos!) y ando liada para dejar todo organizado para la tarde.

El 4 de enero la pasamos a su cuarto.Primer día que dormía sóla y yo también. Qué duro se me hizo, meterme a la cama y no oírla respirar. Era como si no estuviera. 🙁

Nuestro enfermero nos recomendó poner en práctica una técnica, para que durmiera del tirón, que no me dijo el nombre pero que luego busqué y supe que era el método estivill.Cruel y dura para ambas partes y en contra posición a lo que nos puede contar Carlos González y su «bésame mucho». Me pongo una nota mental sobre estos dos métodos, porque los quiero comentar en otro post.
Total, que el primer día puse en práctica el método estivill… 🙁 eso sí, ya os digo que fue una noche y nunca más.Ahora uso otro: el método Naiara Olague, hacer lo que sienta, quiera y me apetezca según vea a Maite.

Y además, metí la pata porque quise que en un día durmiera en otro cuarto y que si se despertaba estuviera en su cama sin teta, cosa que hasta ahora, siempre que se despertaba yo la cogía y la ponía a la teta. Así que mal por mi parte porque quise que hiciera todo en un día. Así que al día siguiente a su cuarto, pero si se despertaba ahí iba yo a darle su ración de teta. Eso sí, en su cuarto y mal sentada, pero bueno… Y por supuesto, se despertó igual o más que en nuestro cuarto, por lo que fue una gozada poder decirles a todos los que me decían «sácala ya» que el sacarla no había mejorada nada. Eso sí, contraargumentaron diciendo que ya era muy mayor y que se daba cuenta de todo. «La tenías que haber sacado mucho antes». 🙁
Cierto es que tomé la decisión de sacarla por nuestro matrimonio, porque ha llegado el momento que necesitamos nuestro espacio, (y no me refiero para tener momentos íntimos, no nada de eso, sino para «delimitar» que somos dos, que aún somos dos, aunque sea sólo a veces.) Si fuera por mi, por mis deseos como madre, no la hubiera sacado.

Mi intención es que dentro de unos días, coincidiendo cuando mi chico vaya de tarde, intentaré que cuando se despierte no darle teta, o no todas las veces que se despierte, que ya me conozco. Además haré que el se despierte y vaya, para que así vea Maite que está su aita y que no hay teta.
Y no es porque no quiera darle teta, al final tengo casi la misma producción que al principio cuando era bebé y sinceramente, quiero dormir, necesito ya dormir del tirón, o aunque sea unas horas seguidas. Y me da mucha pena pensar esto, porque es nuestro momentico y no lo cambiaría por nada del mundo, pero…

Eso sí, todo esto con mi método, que no es estricto, pero que tiene mucho amor y seguro que termina funcionando. 🙂