Una de las cosas, entre muchísimas, de las que me he dado cuenta en el postparto es que muchas mujeres que hemos parido (pese a que me hicieran una cesárea, considero que he parido) tenemos la necesidad de hablar de nuestro parto. Contar nuestra historia, la de nuestr@s hij@s. Yo no soy de cortar a la gente en una conversación, hablo y mucho (sobre todo cuando tengo confianza), pero no suelo ser de las que «alzan la voz» para apoderarse de la conversación. Hasta que me preguntan por el parto.
Como no me dejen contar toda la historia, saco mis uñas de tigresa y peleo por contar toda mi historia, y que se me oiga. Y no sólo soy yo, muchas madres con las que me he juntado también lo hacen, porque lo necesitan. Una de las cosas que te aconsejo para superar un parto no respetado es escribir el relato de tu parto.Yo lo he hecho, y os lo recomiendo. Os ayudará a recordar muchas cosas que creíais olvidadas y a ser más conscientes de todo lo ocurrido.
Si tuvistéis la suerte de estar acompañadas, yo la tuve hasta que me metieron a quirófano, vuestra pareja os puede ayudar a poner sentido a algunas cosas. Leerle el realto cuando lo tengáis, seguro que también le ayuda a «pasar página.» Así que he pensado lo siguiente: hacer una reunión para hablar, desahogarnos, reírnos… Hablar sobre el parto, el postparto, la lactancia… Todo lo que queramos con un café y unos dulces o salados. ¿Quién se anima a venir a mi casa a contarme su parto? ¡Estoy deseando escucharos! He pensado que nos podríamos juntar una tarde de éstas de agosto, ¿qué os parece?
Podéis escribirme a naiaraolaguefb@gmail.com o dejar un comentario en este post y vamos concretando. 🙂