La maniobra de Heimlich la realizaremos en caso de atragantamiento en lactantes, es decir, en niñ@s menores de un año de edad.
Lo más importante que deberemos hacer si nuestro niñ@ se hago es mantener la calma y animarle a que por si mismo intente solucionarlo. Le diremos «Tose, tose» o nosotros mismos toseremos para que nos imite. Si pasados 10 segundos vemos que el problema no se soluciona, entonces, procederemos a realizar la maniobra de Heimlich. Algo que es bastante habitual, como que nos peguen en la espalda para que se nos pase, no es aconsejable y por tanto no deberíamos hacerlo.