Hace dos semanas acudí a un curso que impartía Xamurki para signar con bebés. En el curso, tal y como os comenté en un post anterior, utilizaban el método de cinco deditos. Este método consiste en enseñarle signos (el método usa los signos americanos) para apoyar el lenguaje, la comunicación verbal. Por eso, es muy importante hablarle y hacerle el signo a la vez, ya que el bebé tiene que relacionar siempre, la palabra y el signo. No vale con hacele sólo el signo. Y es muy importante ser constante y tener paciencia. Todos los niñ@s signan, unos antes, otros después.

Me gustó mucho el curso y pese a que empezaba bastante pronto, a las 10, se me hizo muy ameno. A penas dura dos horas, se hacen cortas y te quedas con ganas de seguir practicando los signos, ya que al final del taller Mentxu, la instructora de navarra de cinco de deditos, te hace un repaso por un listado de unos 150 signos. La verdad es que muchos son de lógica, otros muchos ya los usamos en la vida diaria y otros tanto, te los explica con una explicación muy lógica por lo que, nada más salir del taller eres capaz de ponerlos en práctica. ( si haces el taller, te acordaras se esta frase cuando enseñe el signo de papá 😉 )

Me di cuenta, que ya signaba hace tiempo, y seguro que muchas de vosotr@s también lo hacéis: cantando la canción de «un día noé…» / «Han zeuden…» seguro que gesticulas para hacer los animalitos, o cuando le dices «¿quieres comer?» O «¿vamos a domir»? ¿No usas las manos para apoyar la comunicación verbal? Yo sí lo hacía, por lo que poner en práctica los baby signos no me pareció del todo difícil.

Nada más salir del taller, me pensé los signos que pondría en práctica con Maite: te recomienda empezar con 2-3 y cuando el bebé ya haga uno ir introduciéndole más, poco a poco. Yo fui un poco guay, y empecé con cinco:

• Signo de más
• Signo de comer, que aunque se lo hacía, no siempre.
• Signo de Papá
• Signo de pupu, daño
• Signo de galleta

Y seguía con el signo de dormir, que ya llevaba unos días poniendo en práctica.

Y el sábado nada más empezar, me hizo el signo «de más» cuando le estaba dando la comida. (Después de hacerselo yo y preguntare si quería más, claro) Y pensé: va, una coincidencia. Pero a la noche, me lo volvió hacer. Me parecía increíble, pero ahí estaba Maite, juntando sus manitas para decirme que quería más comida. Por supuesto, mi felicidad y babeo siguientes, monumental.
Si os animáis a hacer el curso, que yo os animo, es imprescindible pensar en palabras que ya sabemos que le puedan gustar, como galleta o agua. Así será más fácil que comience a signar.

Los primeros días si que es verdad que yo me hacia un poco lío, porque aunque memorice varios signos enseguida, me costaba usarlos mientras hablaba de manera natural. Además, me pesaba que los usaba desde el inicio de la frase y no solo en la palabra concreta. ¡Eso sí, menudas risas yo sola! Todavía hoy me confundo…pero bueno, las dos estamos aprendiendo.
Si que es verdad tambien, que a veces los haces por repetición, porque ha sido hacer el signo de más, darle más comida y no querer. Por eso, es importante que siempre que haga el signo, esto os lo digo yo, le debemos lo que ha pedido, aunque luego no lo quiera para que siga asociando signo y palabra.

Lo más maravilloso que me ha pasado con los signos y Maite, sucedió hace cinco días. Habíamos bañado, cenado y estábamos jugando un poco en familia antes de ir a dormir, cuando Maite me hizo el signo de ir a dormir. Y le pregunte a ver si quería ir a domir, y me volvió a hacer el signo. Le llevé a la cama y en menos de 20 minutos se había dormido. ¡No me lo podía creer! Era verdad que tenía sueño. Increíble.Y hoy, lunes, es el quinto día que me lo hace y que en media hora se duerme. ¡Wooow! (Para las que les pueda parecer que 20 o 30 minutos no es poco, la media de Maite antes de ir a dormir, suele ser de una hora y media.)
El sábado hasta vi una peli en el sofá a la noche… Creo que no sucedía desde que Maite tenía dos mesicos.

Es importante, sobre todo al principio saber que el bebé no hará el signo perfecto, es decir, que no lo hará tal y como se lo hemos enseñado nosotr@s por eso hay que estar al loro. Y también tener en cuanta el contexto, que eso nos ayudará a entenderle mejor.

El curso tiene un precio de 40 euros si vas sola o de 60 euros si vas en pareja. Yo creo que el precio está bien, porque te dan bastante material, entre otras cosas el libro editado por Claudia Carter, la fundadora y creadora del método. Así que prácticamente es cómo comprar el libro. En el libro vienen más de 200 signos, Claudia haciéndolos con imágenes, que son muy útiles y es lo que usarás para signar con tu hij@, así que yo creo que el dinero está bien invertido.

Como reza el claim de baby signos, «Happy babies, happy familias». Doy fe y pinta muy bien.