Maite levaba unos días tosiendo y estornunando pero no le habíamos dado importancia; se le veía bien, no tenía fiebre, era de vez en cuando… (Además los estornudos en bebés normalmente son por inmadurez del sistema nervioso).
Hasta que el lunes, merendando se atragantó y vomitó un poco de merienda acompañada de flemas verde-amarilletas Y ya esa noche tuvo fiebre. Como a la mañana seguía peor le lleve a la pediatra. Y nos confirmo que tenía un catarro, contagiado por un adulto, en esta ocasión su padre (qué malo son los aires acondicionados.) La verdad que ayer daba mucha penica, hasta que le dimos el apiretal y le hizo efecto, no se movía casi y no hablaba
nada. Y además con los mocos y flemas, se ahogaba… 🙁
La primera vez que se ponía mala desde que nació (quitando la fiebre de las vacunas).
Aprovechando la coyuntura, os comento dos trucos para aliviar el malestar:
- -Cebollla picada en un plato, debajo de la cuna o al lado
de la cama, para que pueda respirar mejor. - -Alcohol en las axilas para bajarle la fiebre.
- -Hacerle limpiezas nasales con suero. Tumbada de lado, le
echamos el suero en un agujero de la nariz. En esta posiciónevitaremos que se trague todo lo de la nariz.
El segundo consejo no lo hemos puesto en práctica, pero mi suegra me comentó que se lo hacia a mi marido, cuando tuvo neumonía de pequeño y que le funcionaba muy bien. Lo de la cebolla,en cambio, es algo habitual en casa, cuando yo tengo catarro, tos
sobre todo, lo hacemos siempre.